Cinco víctimas, dos héroes, un pistolero desarmado a taconazos… Así fue el tiroteo que mantiene en ‘shock’ a la comunidad LGTBI. Estaban pasándolo bien. Un espectáculo de drags en el escenario, música, humor y buen ambiente. Un buen refugio. Esa noche se celebraba un cumpleaños. Y de repente, el odio. Un hombre con un rifle dispara a los presentes.
Cinco personas murieron y al menos 25 resultaron heridas en la noche del pasado sábado por un tiroteo ocurrido en un club LGBTQ+ en la ciudad norteamericana de Colorado Springs (Colorado), unos cien kilómetros al sur de Denver. El presunto autor, un joven de 22 años identificado como Anderson Lee Aldrich, ya está detenido.
Los fallecidos eran clientes o trabajadores del Club Q, un local que acoge a la comunidad LGTBI de la localidad. Como además el tiroteo se produjo en la víspera del Día de la Memoria Transgénero del domingo, el suceso está siendo investigado como un posible crimen de odio.
Los cinco fallecidos son: Raymond Green Vance, De 22 años, iba con su novia, los padres de ella y algunos amigos de sus padres, entre ellos Richard Fierro, padre de su novia (quien luego iba a resultar el héroe de tan trágica noche). Kelly Loving, Su hermana Tiffany emitió un breve comunicado el lunes, donde destaca, era cariñosa, bondadosa y dulce. Todos la amaban, era una persona maravillosa. Daniel Aston, De 28 años, era el supervisor del bar del club y se había mudado a Colorado Springs hace dos años para estar más cerca de sus padres. Derrick Rump y Ashley Paugh.
Pero en esta barbarie de asesinatos, pudieron ser muchos más.