Una vez más la mirada hacia el colectivo de gays y bisexuales, donde se concentran los casos, lo cual ha despertado las quejas de las entidades LGTBI y ha generado ideas equivocadas sobre la naturaleza de la enfermedad causada por este virus: el requisito para la transmisión es el contacto muy cercano. Algo que duele profundamente dentro del colectivo que ya ha sufrido anteriormente el estigma por otras enfermedades de transmisión sexual.
Las autoridades británicas han lanzado un llamamiento especial a los hombres homosexuales, bisexuales y HSM –hombres que tienen sexo con hombres– para que estén alerta ante posibles síntomas de la viruela del mono y acudan al médico. En España, la directora general de Salud Pública de la Comunidad de Madrid, Elena Andradas, confirmó que todos los casos sospechosos son varones jóvenes y “la mayoría” tienen sexo con hombres. La insistencia en este colectivo ha despertado las quejas de las entidades LGTBI por el estigma y ha generado ideas equivocadas sobre la naturaleza de la enfermedad causada por este virus, endémico de África y rarísimo fuera del continente.
Asumir que el virus solo circula por la vía sexual y entre hombres es erróneo, según los expertos. Y puede llevar a otros colectivos a bajar la guardia. “No es una enfermedad de transmisión sexual, como el VIH o la gonorrea, porque puede transmitirse por otro tipo de vías, como las secreciones respiratorias o por heridas en la piel”, aclara María del Mar Tomás, microbióloga del hospital de A Coruña y portavoz de la Sociedad Española de Enfermedades Infecciosas y Microbiología Clínica (SEIMC).
El requisito para la transmisión es el contacto muy cercano, como el que se da en el sexo, pero no solo en esta circunstancia. “No es un virus aéreo muy contagioso pero sí puede transmitirse si se comparten sábanas, toallas, vasos…”, añade Tomás, que lamenta que los mensajes dirigidos a la población HSH puedan “estigmatizar”.
“El hecho de que varios de los casos sean entre hombres que tienen relaciones sexuales con hombres no implica que sea una enfermedad de transmisión sexual como tal. Las relaciones sexuales implican contacto estrecho, y en el sexo anal son más probables las lesiones en piel o mucosas, lo que puede favorecer el contagio”, manifiesta, por su parte, Mar Faraco, presidenta de la Asociación de Médicos de Sanidad Exterior (AMSE).
Desde Móstoles Visible hacemos un llamamiento para no poner el foco en los homosexuales y tener la mirada puesta en la salud sexual global, ya que en los últimos años ha habido una relajación en el uso del preservativo lo que facilita la transmisión de este tipo de enfermedades.